INGREDIENTES: (para 4 personas)
- 200 ml de salsa de soja
- 1 zanahoria
- 1 chirivía
- 2 nabos
- 2 patatas medianas (como el nabo)
- 1 remolacha
- 1 boniato (o batata)
- 1 calabacín pequeño
- Orégano, romero, tomillo...
- Pimienta negra molida
- Aceite de oliva
- Sal
PREPARACIÓN:
2.- Agita con suavidad el bote cada vez que abras la nevera para cualquier otra cosa, así la salsa cubrirá la superficie de la yema. Pasadas 24 horas, saca, escurre y seca con papel de cocina absorbente.
3.- Puedes emplatar colocando la yema o aplastar un poquito el borde contra el plato para que se vea la textura.
4.- Precalienta el horno a 150º con calor arriba y abajo y con aire. Para preparar los chips vegetales, pela todos, lava y seca. Con una mandolina o un cuchillo bien afilado, corta la zanahoria y la chirivía en tiras y el resto en rodajas. Si la punta de la batata o boniato es fina, córtala como la zanahoria. Más importante que el hecho de que midan 1, 2 o 3 mm, es que las rodajas sean de grosor similar para que se hagan a la vez. Cubre dos bandejas de horno con papel vegetal y coloca las verduras en una sola capa. Salpimenta y espolvorea con hierbas aromáticas. A mí me encantan con romero. Añade un hilito de aceite de oliva.
5.- Mete las dos bandejas en la parte central y hornea durante 10 minutos. Cambia las bandejas de posición (la que está encima, ponla debajo) y hornea 10 minutos más. Da la vuelta a los chips y hornea 5 minutos más. A partir de ese momento, hay que vigilar continuamente para que no se oscurezcan, porque amargarán.
6.- Saca, retira de la bandeja y sirve junto a la yema curada. Si prefieres servirlos ya fríos, pasa a una rejilla hasta que se enfríen para que no se reblandezcan.
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